El proceso de venta en una tienda online tiene que ser lo más sencillo posible. Hay que ponérselo fácil a los clientes para que puedan realizar la compra sin ningún tipo de inconveniente.
Vamos a poner un ejemplo, una página a la que llegamos y vamos añadiendo cosas a la cesta. Una vez llegada la hora de comprar, tenemos que registrarnos. En este caso, si no se nos van a mantener los productos en la cesta, y una vez registrados tenemos que volver a añadirlos resultará muy incómodo y es un paso del todo innecesario.
Y el proceso de registro es otro calvario en muchas ocasiones, ¿De verdad necesitamos todos estos datos para cerrar la venta? En ocasiones parece que el registro en nuestra tienda online se utiliza para conseguir los datos que nos permitan fidelizar al cliente, ¿No será mejor cerrar la venta y luego ya trataremos de fidelizar al cliente?.
Lo mismo a la hora de implementar los medios de pago… Elijamos varios y no forcemos al consumidor a pagar con una tarjeta (TPV virtual) si prefieren hacerlo por PayPal o por transferencia bancaria. Es mejor tener un menor margen que no conseguir la venta por no disponer de un medio de pago.