Ultimamente recibimos más cantidad de solicitudes de presupuestos, tanto para nuevos negocios que quieren contar con una presencia online como para aquellos que se dan cuenta que es el momento de actualizar el diseño web de su página.
Es un detalle el que nos lleva a pensar... ¿Cómo saber que debo renovar mi sitio web?
Como todo en la empresa y/o negocio la necesidad de renovación también afecta a su página web. En muchos casos se mantiene la web con muy pocos cambios a lo largo del tiempo, sin actualizar o como mucho añadiendo noticias de actualidad sobre su sector o de la propia empresa. La web no se puede renovar sólo por caducidad, por el propio paso del tiempo y por eso es importante saber si ha llegado el momento de rediseñar la web.
Es importante hacerlo sobre datos concretos. La tasa de rebote es uno de los que nos puede ayudar. Se trata del porcentaje que llega a la web y se marcha inmediatamente, ya sea porque no encuentran lo que buscan o no se sienten cómodos con aspectos como la usabilidad, navegabilidad, etc. de la propia página.
También tenemos que tener presentes otros aspectos como la velocidad de carga de la web, su adaptación a la navegación móvil, la inclusión de ventanas o elementos emergentes que puedan resultar molestos o también algunos en flash que no se visualizan de forma adecuada en determinados dispositivos, como tablets o smartphones. Todo esto debemos medirlo de forma adecuada desde la analítica web.
Muchas páginas web suelen tener dos problemas fundamentales a la hora de organizar la información. Por un lado, un exceso de información, en muchos casos poco relevantes, que provoca rechazo en los visitantes de la página web. Textos muy largos, pocas imágenes o mostrar todo en el instante inicial, sin dar lugar a que el visitante pueda elegir si desea o no más información.
Por otro lado una especie de miedo al espacio en blanco, donde parece que tenemos que llenar todo diseño de nuestra web con textos, imágenes, banners, etc. Una página web sencilla, donde el usuario pueda ver la información de un vistazo puede dar mejores resultados, ya que el usuario tiene la sensación de que mantiene el control sobre lo que la página le muestra.
Por último tenemos que tener en cuenta el tono que queremos adoptar en la web. Los contenidos muy comerciales no suelen funcionar, sino que un contenido más enfocado a la recomendación que a la venta, aunque esto no implica que no debamos incluir llamadas a la acción si lo deseamos para captar clientes.